Discrepa con el importe pendiente por mala calidad y ve desproporcionada la actuación de la Guardia Civil tras la denunciaLa pareja negó haber tenido intención de cometer delito alguno y criticó tanto la actitud del establecimiento como la de la Guardia Civil, cuya actuación calificaron como desproporcionada.
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A. R. LOS BARRIOS | ACTUALIZADO 29.10.2013 - 01:00
La pareja de recién casados acusada de cometer un supuesto delito de estafa por dejar sin pagar parte del convite de su boda negó ayer haber tenido intención de cometer delito alguno y criticó tanto la actitud del establecimiento como la de la Guardia Civil, cuya actuación calificaron como desproporcionada.
El matrimonio, que contactó ayer con este periódico a raíz de la difusión de su caso a través de una nota oficial de la Guardia Civil, reconoció tener un importe pendiente del convite pero, en su descargo, sostuvo haber contactado varias veces con el establecimiento para ajustar las cuentas por no estar de acuerdo con varios conceptos facturados, alegando una mala calidad en el servicio.
Según la información difundida por el instituto armado, la empresa organizadora del evento les denunció por el impago de unos 1.500 euros, por lo que los agentes les localizaron y les arrestaron por un supuesto delito de estafa. El caso está pendiente de la celebración de juicio. A este respecto, la pareja sostuvo haber pasado un mal trago y consideró la actuación policial como exagerada ya que, insistió, el negocio no se puso en contacto con ellos para saldar cuentas. Tanto es así que ahora analizan con su abogado emprender acciones legales por lo sucedido ya que, sostuvieron, no obraron de mala fe.
El joven matrimonio señaló que el precio del convite de bodas quedó fijado días antes de la boda en 5.000 euros para unos 50 asistentes, si bien habían negociado un mes y medio antes de la boda un servicio para 80 personas por 6.300 euros.
En cualquier caso, explicaron, pagaron 1.200 euros de señal cuando hicieron el primer encargo y, tras la boda, pagaron otros 1.900 quedando pendientes 1.559 euros. "A la vuelta del viaje de novios no nos han contestado a varios mensajes de teléfono, el último del 28 de septiembre, y no hemos tenido constancia alguna de reclamación hasta que la Guardia Civil se puso en contacto con nosotros el día 18 de octubre para decirnos que nos habían denunciado y nos dijeron que nos detenían por estafa", relataron.
Según la versión de los contrayentes, el servicio que les prestaron no se ajustó a sus expectativas, aunque no reclamaron en el momento, si bien dijeron no haberse negado a saldarlo.
Este diario contactó con el establecimiento donde se celebró el evento, si bien declinó la posibilidad de realizar comentarios o valoración alguna a Europa Sur sobre la situación al considerar que se trata de un hecho entre sus clientes y la empresa.
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